Cada mujer tiene su esencia propia y no me refiero a su perfume favorito. La esencia de una mujer es un buquè personal de dieta, herencia, hormonas, higiene y salud, un aroma tan ùnico como el ADN.
Napoleòn enviò un mensaje a su esposa, la emperatriz Josefina, en el que le decìa que no se bañase hasta que èl volviera a casa al dìa siguiente.
Le fascinaba su perfume natural.
Aùn recuerdo el aroma de mis hijos cuando eran bebès. Tengo tres hijos, dos hijas y un hijo. Y cada uno de ellos, tenìan su aroma diferente, sutil, suave y ùnico. Ese aroma que tengo en mi memoria y que nunca olvidarè. Ahora que son adultos, tambièn tienen su aroma ùnico e irrepetible, que siento cuando los abrazo, cuando los beso, cuando estàn junto a mi...
Muchas mujeres evitan incluso el pensamiento de su aroma natural y gatan una pequeña fortuna intentando enmascarar su esencia personal...
Pero uno de los milagros que ocurren cuando nos enamoramos de la vida es que empezamos a vernos a travès de la lente del amor incondicional. Lo real nos relaja y dejamos de escondernos detràs de artificios.
La fragancia fabricada por nosotros mismos es una agradable sorpresa, aunque sea difìcil distinguir su sutil aroma porque enmascaramos e olor natural con productos quìmicos y perfumes sintèticos.
Siènte tu propio aroma y disfruta tu sensualidad. No enmascares demasiado tu propio olor, es parte de tu naturaleza, es parte de sentirnos vivos...
Desde los tiempos de los egipcios, se ha venerado el arte de la fragancia femenina. Encontrar un perfume que complemente e intensifique nuestro sentido del bienestar es un regalo espiritual y un placer sensual.
Sin embargo, el paso crucial consiste en descubrir nuestra fragancia bàsica antes de añadirle otros aromas.
La verdadera esencia de mujer comienza en una misma.
¿Sabes que algunas de las fragancias màs exquisitas de la naturaleza como la gardenia, el lirio, la lila, la orquidea, o el lirio del valle, no pueden capturarse de manera natural en un frasco? Sòlo pueden reproducirse en unlaboratorio.
Creo que èste es un pensamiento hermoso sobre el que meditar hoy.
Ve a los jardines y disfruta el aroma de las rosas, de los nardos, de los claveles, del jazmìn. Son aromas que nunca encontraràs de manera natural en un frasco. Inhala y disfruta. Cierra los ojos y siente la vida, siente la presencia de una fuerza divina que està alli, silenciosa e invisible...
No hay comentarios:
Publicar un comentario